Reseña de ‘Flock, Colibri, Oil’ en ‘Rockdelux’ (27 de noviembre de 2015)

Jaime Gonzalo, cuya tensa relación con la banda como productor de Hunted by the Snake probablemente nos arrebató en contemporaneidad sus siempre certeras reflexiones acerca de los siguientes trabajos de Cancer Moon, firmaba en 2015 este comentario sobre Flock, Colibri, Oil, publicado en la web de Rockdelux con motivo de su reedición en Munster Records.

Severo correctivo propinaba la vida a Cancer Moon, al caerles en suerte una discográfica que, sumida en gansteril avatar, acabaría enterrando en vida su ópera prima, Hunted by the Snake (1990). Eso no desinflaría las idées de grandeur del dúo. Tras emplear dos años en segar lazos contractuales con el sello Polar, atracaban en Munster, cumpliéndose así el sueño de Josetxo Anitua y Jon Zamarripa de grabar en el extranjero. No fueron muy lejos, Burdeos, ni dispusieron de demasiado tiempo para plasmar Flock, Colibri, Oil (1992), el fruto de su permanencia en la marca madrileña, con la que tampoco se entendieron. No obstante, era la única que les dispensaba la oportunidad de dar continuidad a un primer trabajo, polémicas sobre la producción aparte, que había colgado las expectativas muy alto.

Siempre con la mosca tras la oreja y una visión nada realista del mundillo en el que predaban —así eran y nada podían o querían hacer por subsanarlo—, producían ellos mismos en los estudios de Kid Pharaon otra consistente pieza, poniendo punto final al pasado fantasma que le crecía al indie noise español, ese mismo año de estreno con la gira Noise Pop. Volvía a quedar claro que trascendían lo que supuestamente prologaban. Sus recursos y conocimientos eran superiores a los del citado colectivo, y, lejos de ruido, como su segundo LP insistía, el espectro en el que elucubraban era el del rock de guitarras, sin rastros de Sonic Youth. Aquí acaso más apelmazado, apurando todavía ideas de Hunted by the Snake, tejiendo también espesas mallas psicodélicas en la estela de Screaming Trees, pero huérfano del carisma de aquel.